Dr. Gastón Cornejo Bascopé
Cochabamba octubre 2015
El heroico vacunador de la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna que partió con Joseph Balmis, quiere llegar a Sucre, a Potosí y luego de realizar la vacunación, quizá viajar a la Gobernación de Moxos y Chiquitos en el Oriente Boliviano, para ello solicitó la autorización de la Real Audiencia de Charcas.
Hacía unos 6 años que Salvani había desembarcado en América y transcurría 1 año 4 meses que trabajaba con últimos esfuerzos en la vacunación efectuada en territorios de la Audiencia de Charcas. En la ciudad de Cochabamba y lleno aún su espíritu de infatigable empeño, escribió una nota al monarca: (8)
“Al Rey Ntro. Señor en su Real Audiencia de Charcas:”En
atención a las Rs. Órdenes que me rigen relativas a la propagación del
maravilloso específico de la Vacuna, debo recorrer todas las capitales de
Provincias de este Virreinato ya propagando el RI. beneficio, ya igualmente
estableciendo los medios que oído el dictamen de la superioridad, me parecieron
más oportunos para su perpetua conservación, que es principalmente lo que desea
y manda S,M. en otra virtud siendo los de Moxos Y Chiquitos de numerosa
población, y mereciendo por parte de la humanidad la mayor compasión aquellos
Naturales al reynar el contagio de Viruela, que con tanta frecuencia se explica
en perjuicio de la religión y del Estado; suplico a V.A. se digne prevenirme si
debo o no pasar a aquellos distritos, como así mismo, donde o de que ramo se me
han de dar los auxilios necesarios para los gastos precisos de tan dilatado
viaje”. “Dios guarde a V.A, muchos años” “Cochabamba mayo 2 de 1810”. “A los Rs
pies de V. Alteza”. (Fdo) José Salvani.
Recibida esta nota en la Audiencia el 8 de mayo de 1810, pasó a
la vista del Agente Fiscal Protector Calvimontes que dictaminó “Que sobre este
particular es preciso oír a los gobernadores de ambas provincias…” (Plata 21 de
mayo de 1810). El 1 de junio el Oidor don José Félix Campoblanco, Regente de la
Real Audiencia, proveía en esta forma: “…. Y mereciendo la mayor compasión de la
humanidad, los naturales de Moxos y Chiquitos, a fin de que se cumplan en
aquellas provincias las piadosas intensiones del Soberano, sin que sean
necesarios los informes que pide el ministerio fiscal, pásese el expediente al
señor Presidente para que se sirva señalar al ramo de donde se contribuyan al
suplicante los auxilios de dinero para gastos de su transporte”
En la Plata a julio 6 de 1810, el señor Presidente Gobernador
Intendente de la Provincia de Charcas, D. Vicente Nieto dispone en forma
favorable la petición. El 23 de agosto la fiscalía confirma. El 23 de agosto la
fiscalía determina que “los costos…., deben satisfacerse de los caudales de las
mismas Misiones por beneficiar a sus naturales”. Cuando se disponían a
comunicar lo resuelto positivamente al Dr. Salvani, se conoció su deceso. Murió
cumpliendo su misión.
En Cochabamba, de donde ya no pudo proseguir viaje, aún vivió el
benefactor cuatro meses. Se anunció el fallecimiento en su casa el 21 de julio
de 1810, tenía 33 años y fue enterrado en la iglesia de San Francisco, según
reza el Parte de Defunción inscrito en la notaría religiosa de Santo Domingo. La
investigación inmediata en San Francisco me informa que el edificio conventual
ha sido remodelado y que las dependencias aledañas donde estuvo enterrado
Salvani fueron eliminadas con todos los nichos de civiles, conservándose
solamente las de religiosos; por tanto, se ha perdido definitivamente la lápida
que señalaba el lugar donde descansaban los restos mortales del Héroe de la
Medicina en la Colonia.
Había recorrido buena parte del territorio americano, enfermo,
con escasísimos medios económicos, luchando contra las inclemencias de la
naturaleza hasta dejar su vida en este empeño. Se admite que Salvani y todo su
grupo efectuaron más de 250.000 vacunaciones. En la historia de la medicina
universal y en la historia de la medicina de Bolivia, se debe considerar a todos
los personajes integrantes del gran proyecto humanitario como gestores heroicos
de la voluntad humana comenzando por Balmis el organizador, concluyendo en los
niños portadores de la vacuna. Para los americanos del sur y sobre todo para el
Alto Perú, integrante de los dos virreinatos José Salvani es “El Héroe y Mártir
de la Medicina”. Nobleza histórica impone rendirle el homenaje que requieren los
grandes benefactores de la Humanidad.
El propio descubridor de la vacuna de la viruela Edward Jenner escribió sobre la
Expedición: “No puedo imaginar que en los anales de la Historia se proporcione
un ejemplo de filantropía más noble y más amplio que este”
Mayor significación aún tiene la afirmación del célebre médico
Gregorio Marañón a propósito del héroe: “Y el pasmo aumenta al leer la
expedición por la tierra del segundo jefe José Salvani, desde Cartagena de
Indias a La Paz, recorriendo el tremendo itinerario con los niños inoculados a
cuestas, febril y extenuado, vomitando sangre, convertido en un espectro, ciego
de glaucoma y manco de una extremidad, sin dejar de vacunar ni un solo día
hasta que la lanceta se le cayó de la mano porque se murió”. En realidad,
Marañón ignoraba que Salvani llegó a Cochabamba, adquirió una residencia donde
falleció cuatro meses más tarde.
Al conocer esta epopeya humana trascendente, me propuse
investigar los detalles del proceso más humano que se diera en la Colonia, el
heroísmo de una vida insigne que terminó en Cochabamba, mi tierra natal. Renové
el descubrimiento de los datos de su fallecimiento en colaboración con otro
médico historiador de seres humanos relevantes, el Dr. Julio Rodríguez Arauco
proveniente de Rosario, Argentina con quien nos allegamos en noviembre 2013 al
Archivo religioso en Santo Domingo de Cochabamba. Calle Santibáñez segunda
cuadra del damero central urbano. En el Libro: “Registro de Fallecimientos,
fechas 1804-1824 Archivo del Sagrario de la Catedral de Cochabamba, Bolivia,
ubicable en encontramos el acta de Defunción. Entierro Nº 6 Fojas 100r-101 de
José Salbani. “En el año del Señor de 1810, el 21 de julio murió en su casa en
la comunión de nuestra santa madre la iglesia D Jose Salbani español soltero
natural de Cervera principado de Cataluña. Edad de 33 años, cuyo cuerpo fue
sepultado al día siguiente en S Francisco con oficio rezado se confesó para
morir con mi teniente de cura Rector D Miguel de Arce el 17 de este. El mismo
recibió el viático y extremaunción de su mano para que conste y firmo. Melchor
de Rivera y Jordán”
Finalmente, el suscrito afirma que la Real Expedición
Filantrópica de la Vacuna fue el acto epidemiológico de mayor significado en
favor de la salud, con objetivos de prevención, curación y promoción más
trascendente desde la península a las Colonias, el único; y por sus alcances de
dramático heroísmo fue el primer acto pionero de humanismo de carácter
continental, el que, actualmente, se persigue con anhelo para humanizar la
medicina contemporánea internacional, deshumanizada y utilitaria.
*****************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario